ISLAS SVALBARD

Son los territorios más remotos, salvajes, inaccesibles y extensos de Noruega. Las Islas Svalbard, en el Alto Ártico, forman un archipiélago de 63.000 km2 envuelto en un cuadro de masa glaciar y paisajes infinitos. Su magia helada es una provocación a los sentidos que resulta difícil de explicar con palabras.

Longyearbyen, su capital, se levanta en un valle entre dos montañas achatadas a orillas del Océano Glaciar. Las casas rojas y grises del municipio son extremadamente sencillas en su arquitectura  aunque en el interior se respira calidez y confort. Desde aquí,  la orografía blanca domina el paisaje de montañas,  llanuras  y mares de hielo. Más del 70% del territorio son parques nacionales o reservas naturales en las que conviven  gran cantidad de aves, renos de pelo largo, zorros y otros animales marinos como focas, colonias de morsas y más de 2.500 osos polares.

Cruzar este archipiélago en motos de nieve en invierno o lanchas a motor en verano nos permite disfrutar de este privilegio de la naturaleza ártica. Los safaris en barcos y veleros son otra alternativa para conocer el archipiélago y su fauna.